Las actividades filantrópicas de Stephan Schmidheiny se rigen por su actitud empresarial y por un resultado triple, la llamada «triple bottom line». Sus fundaciones incluyen en su labor criterios sociales, ecológicos y económicos.
Las fundaciones de Stephan Schmidheiny asumen riesgos de negocios. A menudo proporcionan capital inicial para que, en una segunda fase, una vez que los proyectos apoyados han dado buenos resultados, otros inversionistas participen en ellos.
Con la creación de Viva Trust en 2003, Stephan Schmidheiny volvió a adentrarse en un territorio filantrópico inexplorado. Estableció un fideicomiso irrevocable según el derecho británico, al que donó sus compañías latinoamericanas. Desde entonces, Viva Trust ha invertido una parte considerable de sus ganancias en la Fundación Avina.
Fundes
Junto con el Arzobispo de Panamá, Marcos McGrath, Stephan Schmidheiny lanzó en 1984 la iniciativa Fundes, una fundación para el desarrollo sostenible del sector privado en América Latina, cuyo objetivo es fortalecer las capacidades empresariales de pequeñas y medianas empresas en el continente, apoyando así el progreso social y económico y contribuyendo al desarrollo sostenible de la región. Actualmente, está activa en doce países latinoamericanos.
Alexander Schmidheiny Stiftung
Tras la temprana muerte de su hermano menor, Alexander, Stephan Schmidheiny creó en 1993 la fundación Alexander Schmidheiny Stiftung, que se centra en iniciativas locales de su región de origen, la Suiza oriental. En memoria de Alexander Schmidheiny, esta fundación fomenta proyectos culturales, sociales y ecológicos, particularmente en el valle del Rin.
Avina Stiftung
Stephan Schmidheiny creó Avina Stiftung en 1994 con el objetivo de apoyar proyectos innovadores para una sociedad más sostenible. Durante los primeros años y hasta que se fundó la Fundación Avina en 2001, Avina fue particularmente activa en América Latina. Hoy en día, Avina Stiftung se centra en el tema de los alimentos saludables y producidos de manera sostenible. La fundación pretende estimular el cambio proporcionando una plataforma para los pioneros y financiando ideas con visión de futuro.
Fundación Avina
De Avina Stiftung surgió la Fundación Avina en 2001. En aquel entonces, la red Avina había alcanzado un tamaño crítico en América Latina. Hoy en día, la Fundación Avina está presente en 21 países latinoamericanos a través de 14 oficinas y la colaboración con socios. La Fundación Avina se compromete con el desarrollo sostenible de Latinoamérica.
MarViva
Erica Knie y Stephan Schmidheiny crearon en 2002 la Fundación MarViva, orientada a la conservación y el uso sostenible de los recursos marinos y costeros en el Pacífico oriental tropical. Actualmente, MarViva opera en Costa Rica, Panamá y Colombia.
Viva Trust
Con la creación de Viva Trust en 2003, Stephan Schmidheiny se adentró en un territorio filantrópico inexplorado. Estableció un fideicomiso irrevocable según el derecho británico, al que donó sus compañías latinoamericanas. El cometido de Viva Trust consiste en contribuir al desarrollo de Latinoamérica a largo plazo. Una parte considerable de los beneficios obtenidos con las actividades industriales se invierte en la Fundación Avina y en otras actividades filantrópicas.
Puesto que cree en el potencial humano y en la dinámica del desarrollo, Stephan Schmidheiny ha apoyado a numerosas personalidades innovadoras en la realización de sus sueños.
Tate Modern: el arte en la industria
Un día nublado de noviembre de principios de los años noventa, Lord Dennis Stevenson mostró a Stephan Schmidheiny una central eléctrica venida a menos situada en el Bankside de Londres, y le esbozó la idea que había desarrollado como presidente de la Tate Gallery junto con su director Sir Nicholas Serota, a saber: convertir ese lugar en ruinas en un museo único de arte moderno. Stephan Schmidheiny se contagió del entusiasmo y apoyó el proyecto de forma sustancial como uno de los primeros donadores. De este modo se sentaron los cimientos de uno de los edificios culturales más importantes de Gran Bretaña.
El Tate Modern fue inaugurado en el año 2000 y es hoy, con 5 millones de visitantes al año, el museo de arte moderno y contemporáneo más visitado de todo el mundo. En junio de 2016 abrió sus puertas Switch House, una ampliación con la que casi se ha duplicado el área de exposición y que también fue apoyada de manera decisiva por Stephan Schmidheiny.
Acabar con los conflictos armados
Durante el tiempo en el que erigió su grupo industrial en América Latina, Stephan Schmidheiny vivió muy de cerca el enorme subdesarrollo político y económico que aqueja al continente a pesar de sus inmensos recursos. Junto con su amigo el economista peruano Hernando de Soto, empezó a analizar de forma sistemática soluciones para lograr un desarrollo social y económico sostenible.
Concedieron especial importancia a acabar con los conflictos armados. Con el apoyo de Stephan Schmidheiny, Hernando de Soto negoció con éxito en los años noventa un acuerdo de paz entre el Gobierno peruano y Sendero Luminoso.
Con el fin de solucionar conflictos armados, Stephan Schmidheiny ha respaldado, desde entonces, distintas iniciativas de forma decisiva. A principios del nuevo milenio participó en la creación de la organización The International Council on Security and Development. Su fundadora, Norine MacDonald QC, aboga principalmente en Afganistán por una solución sostenible del conflicto, que tenga en cuenta, sobre todo, los intereses de los pequeños campesinos.
En 2010 estuvo entre los iniciadores de Inter Mediate, una fundación inglesa especializada en la mediación en conflictos, que hoy intercede con éxito en Colombia, Turquía, Libia y Afganistán, entre otros países.